Sector
transportes
Contar con un sistema de transporte eficiente facilita las operaciones entre empresas facilitando el comercio dentro y fuera de nuestro país. En el otro extremo, contar con un sector de transporte mal regulado y poco competitivo, dificulta el intercambio comercial y encarece los productos para los consumidores.
En México, la apertura comercial emprendida en las últimas décadas contribuyó considerablemente al crecimiento del país, sin embargo, es necesario complementar dicha apertura con una política que contribuya al desarrollo del sector de transporte para facilitar el intercambio comercial. Esto permitirá aprovechar las oportunidades comerciales derivadas de la cercanía con Estados Unidos o el crecimiento de mercados potenciales como China.
En el sector de transportes la regulación juega un doble papel. Por un lado, debe asegurar las condiciones de competencia en las distintas modalidades de transporte, por el otro, cumple la función social de velar por la seguridad de los pasajeros. En este sentido, la regulación debe tener como objetivo solucionar los problemas específicos de cada uno de las modalidades de transporte, pero también integrar una visión sectorial que permita al transporte en México ser una verdadera palanca del crecimiento.
Por ejemplo, el transporte ferroviario presenta problemas de concentración, mientras que el sector de autotransporte se encuentra “atomizado” por los Hombre-Camión. El sector portuario presenta un riesgo de sobreinversión en lugares no requeridos mientras que en cuanto a infraestructura carretera es urgente elevar los estándares de ésta para facilitar el comercio sobre todo con nuestro principal socio: Estados Unidos. Las diferencias señaladas en la organización industrial de cada subsector implican diferentes retos y propuestas de solución, pero esto no debe evitar que se integren objetivos concretos para el sector de transportes en conjunto.
Hoy en día, en México el 23% de la actividad del sector transportes corresponde a autotransporte de carga, 19% a transporte terrestre de pasajeros, 19% a transporte aéreo, sólo el 6% a transporte ferroviario y 2% a transporte por agua. El resto corresponde a servicios relacionados con el transporte, transporte por ductos y turístico. Una visión integral del sector transporte podría contribuir a aprovechar mejor la infraestructura con la que cuenta el país para incrementar la conectividad y de esta manera beneficiarse de una economía cada vez más integrada comercialmente.
1. CIDAC con datos del Censo económico 2011 INEGI