Compras
Públicas
Las distorsiones y brechas que existen entre las legislaciones locales, la Ley Federal y los estándares internacionales dan cuenta de las debilidades y retos que existen en el ámbito de compras públicas en México. Transitar hacia un marco normativo sólido y congruente para adquisiciones, arrendamientos y servicios públicos resulta impostergable pues de ello depende el buen funcionamiento de las dependencias de gobierno – en cualquiera de sus órdenes- y la calidad de los servicios que son ofrecidos a los ciudadanos.
Para lograr este objetivo, el primer paso es establecer, para todas las entidades, una serie de requisitos mínimos que llevarían a sus leyes a cumplir con los cuatro principios que deben regir todo proceso de compras públicas: maximizar el valor del dinero, promover la competencia, procesos eficientes y efectivos, e integridad y máxima publicidad. El ideal, sin embargo, no necesariamente es establecer un único procedimiento de compras públicas para todo el país, sino que los 32 cuerpos normativos en la materia tengan un sólo denominador común: el uso responsable y racional de los recursos públicos.